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CARTAS DE VENTURA A LUCIA

Las Vegas, octubre 30 de 1960

 

Srta. Lucía González

Paso Real

 

Mi querida noviecita :

Te saludo en el nombre del Señor, deseando que estés bien; yo gracias a Dios estoy.

Lucía, no sabes cuanto desee hablar contigo aunque fuera un ratito a solas. Después que usted se fueron, pasado un rato, estábamos un grupo frente al cuarto del apóstol y él me miró por entre los demás y me dijo: “Puede hablar una hora con su muchacha”. A lo que le contesté: “Ya ella se fue”, y el grupo prorrumpió a reír.

Quiero hablarte para ir dando los toques finales a nuestro noviazgo. Algunas cosas no me gusta tratarlas por carta. Si ustedes pueden venir a los cultos de espera de La Lisa, espero que nos concedan la oportunidad para hablar un ratito. (Digo ratito porque Ramazzini está en la campaña y estoy aprendiendo a hablar en guatemalteco). Sofía te manda recuerdos. Hoy me tocó cocinar y ella dice que quería que tú me vieras cocinando. Aprende tú a decir ratito con Lolita.

Se me olvidó decirte que cuando compres los zapatos no los busques de tacón, para que no luzcas más alta que yo.

Eleobaldo quiere de todos modos que tú vengas conmigo para la campaña; hasta para después de la conferencia hace planes para traer a Luisa y que trabaje contigo. Por mi parte, junto a ti, me sentiría bien bien lo mismo aquí que allá. ¿Y tú? Dime por fin sobre el día, que has determinado, si antes o después. Hasta mañana que es tarde.

Lucía, hoy continúo.  Ayer recibí una cartita de Honoria y dice que allá todos están muy contentos, incluyendo a los miembros, porque creen que nos vamos a casar allá. A mí en parte me gustaría en La Lisa y en parte en Matanzas. Veamos donde resulta ser por fin.

Si recibes ésta a tiempo y me contestas rápido, contéstame a Palos, de lo contrario a La Lisa, porque desde el día 11 posiblemente vamos para allá.

Dale recuerdos a todos los hermanos. A Orestes especialmente no se lo dejes de decir. A Benigno que si se ha rejuvenecido mucho desde que es juvenil. Los hermanos aquí te recuerdan. Yo no te olvido. Te quiere tu novio,

P. Ev. Buenaventura Luis